94-EL DESAPEGO
LO IMPORTANTE ES LO QUE NO PUEDES TOCAR
Javier Sanmartín Soler


El apego es el afecto, el cariño o la estimación hacia una persona, animal o cosa. En su definición podemos encontrar las dos formas de apego:
Hacia las personas y los animales.
Hacia las cosas.
Cuando nos sentimos inseguros nos apegamos a las cosa, a las relaciones o a las personas. El apego hacia la vida, las personas y los animales es importante. Del apego hacia las cosas se puede prescindir. Como persona con el paso del tiempo he aprendido a no tener mucho apego a las cosas materiales y corriendo me he dado cuenta, de que necesito poco para ser feliz. El desapego muchas veces es bueno para nuestra salud mental ya que puede suponer un lastre emocional y a la hora de correr ese lastre nos puede afectar. Buda dijo:
“El mundo está lleno de sufrimientos;
la raíz del sufrimiento es el apego;
la supresión del sufrimiento es la eliminación del apego”.
Así en una definición más espiritual podemos decir que se trata de una vinculación compulsiva a una cosa o persona determinada, originando la creencia de que sin esa cosa o persona, no es posible ser feliz. Las cosas innecesarias a las que nos aferramos constantemente y pensamos que sin ellas no vamos a ser felices, son solo motivos de angustia para nosotros. Lo que te hace feliz no es la posesión en si, sino los pensamientos que hay en la mente. Este placer es momentáneo y conlleva miedos, inseguridades, vinculaciones emocionales innecesarias, etc...
Solo tu puedes ser feliz y disfrutar de todos los momentos prescindiendo de las cosas innecesarias. El cambio se produce cuando se unen el conocimiento y la comprensión, que suponen un valor interior que debemos desarrollar para tener un mayor crecimiento personal.
Que practiquemos el desapego no significa que tengamos que desprendernos de todo aquello que es importante para nosotros. Únicamente debemos renunciar a los excesos. Los límites los pone cada uno. El desapego se tiene que entender como que tenemos que renunciar al interés por el resultado.
Desapegarse es comenzar a descubrirse a uno mismo. La liberación emocional nos hace vivir con más tranquilidad. Todo esto también influye a la hora de correr. Ya que cuantas menos presiones mentales tengamos a la hora de entrenar o de competir estaremos más centrados en nuestros objetivos.
Existe una fábula budista que explica perfectamente lo que es el desapego, como vía para alcanzar la tranquilidad espiritual, el bienestar y la felicidad y dice así:
Un turista americano fue a El Cairo, con el único objetivo de visitar a un famoso sabio. El turista se sorprendió al ver que el sabio vivía en un cuarto muy simple y lleno de libros. Las únicas piezas de mobiliario eran una cama, una mesa y un banco.
- ¿Dónde están sus muebles? - preguntó el turista.
Y el sabio también preguntó: - ¿Y dónde están los suyos?
- ¿Los míos? - se sorprendió el turista -¡Pero si yo estoy aquí solamente de paso!
- Yo también… concluyó el sabio.
También existe una frase budista que dice: “No es más rico quien más tiene, sino quien menos necesita”.