233-MI UNIVERSO. LA VUELTA AL APARTAMENTO
EL CANSANCIO EMPIEZA AQUI
Javier Sanmartín Soler


La crónica de la carrera la podéis leer en el artículo 79 del bloque I por si no lo habéis hecho. Esta es la continuación de lo que sucedió después de acabar la prueba.
Los ganadores fueron Pau Capell y Pablo Villa que entraron juntos en la meta y consiguieron el primer puesto. Pararon el cronómetro en 13 h 4 min 10 sg. El podio lo completó el estadounidense Dylan Bowman que hizo un tiempo 13 h 40 min 28 sg. Yo había hecho el doble de tiempo (26 h 35 min y 13 sg) pero estaba satisfecho.
Al terminar Adolfo y yo fuimos caminando hasta el coche que estaba cerca. Había poca gente, me imaginé que eran los familiares de los corredores que aún faltaban por llegar. En cuanto pude me quité la mochila y el frontal que utilicé para la carrera. Me había acostumbrado a correr con ellos y no me molestaban, pero al quitármelos sentí alivio. Me senté en el coche y abrí la cerveza. Estaba aún fría y el primer trago me supo a gloria. Adolfo conducía y le dije que necesitaba darme una buena ducha.
Estábamos en el otro extremo de la isla y había que regresar a Las Palmas que era donde teníamos el apartamento. Adolfo también empezaba a estar cansado puesto que apenas había descansado, llevaba una buena paliza en coche yendo de avituallamiento en avituallamiento.
No habíamos utilizado el apartamento mucho puesto que solo habíamos descansado en él la primera noche. La idea era que Adolfo lo hubiese aprovechado un poco más mientras yo corría, pero al final el cabezota hizo lo que quiso y decidió ayudarme. Cosa que le agradezco.
Como yo había tardado más de lo esperado en acabar la carrera disponíamos del tiempo justo para llegar al apartamento, dormir un rato e ir al aeropuerto. El vuelo con destino a Madrid salía a 11:15 h por lo que no teníamos mucho margen para relajarnos. El viaje duró 45 minutos y fuimos charlando. Cuando llegamos al aparcamiento tuvimos que andar unos 400 m y en ese momento me costó andar.
Al entrar en el alojamiento lo primero que hice fue quitarme la ropa. Estaba cansado y ya me costaba moverme. Aun así tenía que hacer varias cosas antes de meterme a la cama. La ropa apestaba y la metí en una bolsa. Luego me metí en la ducha. El agua caliente salía con bastante presión, lo cual era de agradecer. Tuve que enjabonarme varias veces puesto que iba muy sucio. Estuve unos 10 minutos y mi cuerpo lo agradeció. La ducha me sentó de maravilla.
Al salir de la ducha aproveché me lavé los dientes y me puse el pijama. Luego aproveché para recoger toda la ropa sucia y el material que había utilizado en la carrera y lo metí en la maleta. Me tumbé en la cama repasando que no tuviese ninguna tarea más pendiente puesto que ya no me quería levantar. La cama era pequeña pero resultaba confortable y las sábanas estaban limpias. Adolfo también estaba tumbado en su cama, había encendido la televisión y estaba enredando con el teléfono móvil.
Me acordé de que tenía que hacer el Check in del avión para elegir los asientos del viaje y cogí mi teléfono. Tenía ya tanto sueño que me quedé dormido un par de veces. Cuando miraba a Adolfo le pasaba lo mismo por lo que decidimos que ya era hora de descansar.
Quedamos en despertar a las 08:20 h para poder ir a desayunar a una cafetería a las 09:00 h. Apagamos la luz y bajamos el volumen de la televisión. No habían pasado apenas tiempo y Adolfo ya se había dormido.
Estuve unos minutos pensando en la carrera. Estaba satisfecho en general con haber podido acabarla pero tenía un ligero poso de que no había salido todo lo bien que yo pretendía. Pero tenía que ser prudente y prefería esperar para ver la clasificación y poder hacerme una idea más exacta de lo que había pasado. Más o menos sabía en lo que había fallado, pero quería ver los tiempos de los demás para poder compararme. Poco a poco avanzaba un potente sueño atrasado que envolvía, miré el reloj eran las 03:20 h y cerré los ojos. Al momento me dormí.