210-MI UNIVERSO. OCTUBRE 2019

El mes de octubre tenía que empezar a correr más y tenía que hacer una vez a la semana una tirada larga. Pero por unas cosas u otras no fue así. Más o menos entrenaba bien durante la semana pero cuando me tocaba hacer un entrenamiento largo no lo podía hacer. Surgía un imprevisto, aparecía un compromiso o se me juntaban muchas cosas que había demorado y que inevitablemente tenía que hacer. Aun así no me preocupaba en exceso ya que siempre intentaba adaptarme a las situaciones y entrenar cuando podía. No podía ser excesivamente estricto conmigo mismo ya que tenía demasiadas obligaciones. Tampoco quería que mi entorno pagase las consecuencias ya que mi vida social era reducida. Solo tenía que organizarme.

Quedaban 5 meses y tenía que afinar la preparación. Tal vez iba algo retrasado pero tenía claro que no iba a tirar la toalla. De una manera u otra en marzo tenía que estar en mi mejor momento físico.

La semana de las fiestas del Pilar era del 7 al 13 y tenía a Mara. Fue al colegio hasta el miércoles 9. Yo sin embargo trabajaba esa semana de mañanas por lo que mis padres se hicieron cargo de ella el jueves 10 y el viernes 11. En cuanto salía de trabajar esos días recogía a Mara y nos íbamos al piso nuevo.

Hacía calor para el mes que estábamos de hecho hacía un tiempo estupendo. Era suave como el del mes de mayo y a mediodía se podía salir de casa a correr con pantalón corto y camiseta. No recordaba para esas fechas un tiempo así. Por las noches refrescaba pero tampoco hacía un frío excesivo, más bien era contenido. Aun así por la mañana ya había que llevar algo de abrigo.

El viernes 11 quedamos en las ferias con mi hermano, su familia y mis padres para que las niñas se subiesen en las atracciones. Al día siguiente fuimos a comer a casa de mis padres. El domingo 13 era el último día de fiestas y por la tarde fuimos a la feria de muestras a pasar la tarde.

La semana siguiente no tenía a Mara y trabajé de tardes. La semana pasó rápida y entrené bien (solo me faltó la tirada larga). El día 18 quedé con Adolfo para cenar y nos pusimos redondos, como siempre.

El día 24 tenía que ir al dentista. Por fin finalizaba el tratamiento de la ortodoncia y ya tenía ganas. En la última revisión me habían apretado una especie de hilo metálico entre los dientes que me rozaba con el interior de la boca y me producía unas pequeñas yagas que me hacían ver las estrellas. Del resto del tratamiento no me podía quejar, era molesto pero se podía llevar. Pero lo del último mes fue algo más serio. Había terminado y mi boca lo agradeció.

Este mes como capricho me compré un casco nuevo de moto y una cazadora. Me apeteció, indagué por internet y como estaban bien de precio... Ya me tocaba renovarlos puesto que los anteriores estaban cuidados pero ya tenían sus años. Además también compre un “joystick arcade” repleto de juegos para que Mara y yo nos entretuviésemos jugando en casa cuando empezase a hacer frío de verdad.

El 29 de octubre mientras estaba trabajando de tarde recibí un mensaje de que un tío mío había fallecido. Tenía 73 años, estaba delicado de salud y murió de cáncer. Al día siguiente lo enterraron en Muniesa (Teruel). Era una buena persona y él también había contribuido en convertirme en la persona que soy. Recuerdo que cuando yo tenía 19 años me consiguió mi primer trabajo antes de realizar el servicio militar. Gracias a ese trabajo pude ahorrar y comprarme mi primera moto.

Por otro lado mi tía se quedaba sola. Era una de las mejores personas que conozco y lo sentí mucho también por ella. Mi hermano y yo somos sus únicos sobrinos y no quería que se sintiese sola. Por eso los siguientes días estuvimos pendientes de ella, era lo menos que podíamos hacer. Mi tía nos cuidaba a mi hermano y a mi desde pequeños cuando el verano íbamos al pueblo. Cocinaba para nosotros y lo hacía a la perfección. Siempre pendiente, amable, servicial, jamás la había visto discutir y siempre tenía una sonrisa. Vamos que era una joya, un ejemplo y todo el mundo la quería.

El día 31 estaba malo, aun así salí a correr 6 Km puesto que si no lo hacía no llegaba a los 600 Km ese mes. Para mi correr 6 Km era poco pero tenía que hacerlo y así sudaba algo. Al terminar el mes había corrido los mismos días que el mes anterior (25) y había descansado 6 (que eran muchos). Pero por lo menos los kilómetros eran los que tenía que hacer, más o menos.

OCTUBRE 2019

La actividad física que realicé repartida por semanas fue la siguiente:

Semana 1: PA 4, carrera 3, total 68 Km.

Semana 2: PA 5, carrera 6, total 136 Km.

Semana 3: PA 6, carrera 6, total 136 Km.

Semana 4: PA 5, carrera 7, total 200 Km.

Semana 5: PA 3, carrera 4, total 61 Km.

Total mes de Octubre 31 días: 23 PA y 25 Carreras (601 Km).