112-EL ORIGEN. LA NORMALIDAD
INTENTANDO ENCONTARAR TRANQUILIDAD
Javier Sanmartín Soler


Es común que la gente piense que una persona no está preparada para correr ciertas distancias. Lo cual no es del todo correcto, ya que el cuerpo es más fuerte de lo que nosotros mismos creemos y estas cosas con la preparación adecuada se pueden conseguir. La mayoría de las personas que salen a correr a lo largo de su vida se conforman con correr como mucho la distancia de un maratón. Distancias mayores pocos son los que se plantean siquiera poder hacerlas. Pero lo cierto es que desde épocas ancestrales siempre han existido individuos dispuestos a correr distancias enormes e impensables para la mayoría de sus congéneres.
En la actualidad sigue habiendo este tipo de personas y cada vez son más habituales. De hecho algunos han podido adquirir cierta fama y un prestigio importante gracias a las carreras de ultra fondo que se disputan a lo largo de todo el planeta. Una vez pude ver un vídeo en el que uno de estos corredores en una entrevista, daba unas pautas para poder entrenar este tipo de carreras a personas que corrían de forma regular. La gente que lo escuchaba estaba asombrada. El corredor solo hablaba de su vida cotidiana, entrenamientos y de como compaginar todo. En cuanto comentó las horas que entrenaba y las distancias que recorría la gente esbozó una mueca de incredulidad. Era más exigente que un trabajo. Al terminar la entrevista la gente se levantó y le aplaudieron cosa que a él le sorprendió ya que el solo explicaba su vida.
Para hacer eso lo primordial es entrenar y muchos no lo comprenden o les cuesta entender, pero es cuestión de prioridades. En mi caso solo hay tres cosas que están por encima de todas (familia, amigos y trabajo) todo lo demás es secundario y puede esperar (comer, dormir, etc...). No se trata de volverse obsesivo, pero lo cierto es que el nivel de implicación y sacrificio deben de ser altos. Se trata de buscar el equilibrio y compatibilizar una vida en la que haya armonía. Esto supone entrenar con frecuencia y cualquier alteración de este equilibrio (o permanecer distraídos) hará que no estemos centrados.
Cuando uno está inmerso en este tipo de preparación ha de saber que debe entrenar tanto entre semana como los fines de semana, los festivos, etc... y alternar los periodos de descanso para recuperarse y poder continuar. Como curiosidad diré que Kiliam Jornet referente en este tipo de carreras, descansa al año de correr unos cuatro días.
Cada persona es única y el que mejor se conoce es uno mismo. Cada uno debe saber cuales son sus límites y hasta donde puede llegar. Desde luego que tener un entorno que entienda lo que uno hace facilita más las cosas. Mi caso es diferente a otros ya que no dispongo de ninguna persona que pueda ayudarme con los entrenamientos y tengo que adaptarme a mis horarios. Pero eso no importa, desde hace años que he aprendido a hacerlo. Cada uno tiene que valerse por sus propios medios.
A veces hablo con compañeros de trabajo que hacen deporte, algunos incluso que están federados en deportes como el triatlón y compiten. Cuando hablamos de entrenamientos siento que me escuchan pero no entienden lo que hago y piensan que acabaré lesionándome con el tiempo. Mis sesiones de trabajo son diferentes con respecto a lo que ellos están acostumbrados a realizar. Digamos que ellos practican deportes más vistosos y reconocidos que lo que yo hago. Pero para mi no se trata de competir, sino de entrenar y estar a gusto con uno mismo.